La Turbinoplastia es la  cirugía que se realiza para corregir el bloqueo nasal causado por el agrandamiento de los cornetes. Se realiza con endoscopia (cámaras y lentes de magnificación), sin heridas externas o visibles. El exceso de hueso y/o mucosa  puede eliminarse para reducir el tamaño de los cornetes. Es un procedimiento seguro, bien tolerado, rara vez requiere hospitalización.

Los cornetes están ubicados a ambos lados de la nariz. Son estructuras óseas revestidas de mucosa. La mucosa es un tejido delgado que reviste el interior de la nariz, los senos nasales y la garganta. Este tejido segrega la mucosidad que ayuda a atrapar el polvo y otras partículas contaminantes del aire. Los cornetes y la membrana mucosa calientan, humedecen y purifican el aire que se respira por la nariz.

¿Qué produce el agrandamiento de los cornetes nasales?

Los cornetes son un tejido muy reactivo, las alergias y la inflamación crónica o sinusitis son las causas más frecuentes de este sobrecrecimiento.

¿Qué pruebas realizan para confirmar el aumento o hipertrofia de los cornetes nasales?

• Endoscopia nasal diagnostica
• Rinomanometria
• Tomografía Computarizada nasal en casos en que se planifique cirugía o se piense en sinusitis asociada.

¿Cómo se si soy candidato para esta cirugía?

Si con el tratamiento médico no se ha conseguido mejoría significativa, se debe considerar la posibilidad de realizar una turbinoplastia. Este procedimiento puede combinarse con otras operaciones en la nariz como una septoplastia o cirugía endoscópica de los senos paranasales de ser necesaria.

Preparación del paciente

Requiere evaluación personalizada e individualizada para definir alcance, beneficios y riesgos de esta cirugía y debido a la gran variedad de técnicas disponibles. El paciente debe someterse a una evaluación médica exhaustiva, laboratorios, pruebas de imágenes por radiografías y tomografías, examen cardiovascular  y anestésico pre quirúrgico. El paciente debe haber recibido tratamiento médico máximo sin tener respuesta satisfactoria.

Intervención

La turbinoplastia  endoscópica tiene una duración de 45-60 minutos según la complejidad del caso. El paciente debe estar en ayunas las 8 horas antes de la cirugía. Requiere anestesia general. No suele necesitar internamiento.

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